Una de las estrategias para la disminución del CO2 en nuestras operaciones es el coprocesamiento de combustibles alternos.
Amparados en la Ley 225-20 Ley General de Gestión Integral y Coprocesamiento de Residuos Sólidos, la cual define el coprocesamiento como la integración ambientalmente segura de los residuos y materiales a un proceso de producción distinto del que los generó, con la finalidad de ser aprovechada como energía o como materia y reducir en consecuencia el uso de combustibles fósiles y materias primas convencionales mediante sustitución.
El Coprocesamiento de Combustibles Alternos es una solución a dos problemas de nuestra sociedad:
El primero es la gran cantidad de residuos sólidos en vertederos a cielo abierto. Estos residuos al ser depositados en los vertederos a cielo abierto provocan al descomponerse gases de efecto invernadero (GEI) como es el metano, el cual es 28 veces más intenso que el CO2. Además de otros males que atraen como incendios, plagas, enfermedades y el uso de espacios que se pueden aprovechar para otra vocación.
El segundo es la reducción de las emisiones de CO2 en la producción de Clinker para el cemento. Parte indispensable en este proceso es el uso de combustibles en el horno, el cual históricamente se ha utilizado combustibles derivados de petróleo. Sin embargo, gracias a los procesos de innovación se ha logrado introducir residuos tanto municipales como industriales que no tienen vocación para el reciclaje y que cumplen con ciertos parámetros de calidad, en sustitución del combustible fósil. Residuos sólidos como llantas, Biomasa, cenizas resultante de procesos de generación eléctrica a carbón y otros combustibles derivados de residuos (CDR) como plásticos no reciclables, tela contaminada, madera contaminada, etc. Además de otros residuos líquidos como aceite usado y lodos con alto poder energético (sludge).
Para el año 2023 nuestra planta de cemento ubicada en el municipio Quisqueya de San Pedro de Macorís, coprocesa en un año calendario:
- 3,000,000 de litros de Sludge
- 800,000 litros de aceite residual
- 5,000 toneladas de Cenizas inquemadas
- 1,000 toneladas de picadura de tabaco
- 500 toneladas de RDF
- 150 toneladas de llantas usadas